viernes, 29 de agosto de 2008

Cartas al Exilio XXX

Querido Exilio:

Se me hace muy difícil el aceptar tu renuencia al arte, amor mío; no entiendo muy bien como podes pedirme que clausure un proyecto de comunicación basado en las opiniones de un ignorante: sabiendo que la obligación de todo comunicador como tú y yo es esa, comunicar, y si logramos despertar una critica aunque sea mala logramos nuestro objetivo de despertar una emoción en el lector... peya no me pidas que claudique, no puedo entenderte nunca: qué haces con alguien como yo que vive para escribir ¿le pedirías a Marquez que no contara la historia de sus abuelos?

Querido Exilio; vos sabes que te amo, y nada de lo que hago lo hago por lastimarte o humillarte, vos sabes también que en la clandestinidad tu eres Exilio y yo Raíces; y que nada de lo que pase aquí tiene porque afectar tu vida como no sea como Exilio, además sabes que el exilio será pasajero, pero nos quedara la eternidad juntos, y si no podemos aceptarnos como somos será muy difícil que estemos juntos esa eternidad...

Querido Exilio; vos decís y te jactas que me apoyas y me comprendes, pero cada cosa que yo trato de hacer vos querés frenarla o detenerla, no te interesa que yo me desarrolle como persona, y como artista y escritor, si te digo que quiero que vallamos a caminar y conocer el mundo no querés, si te pido que nos detengamos a sacar una foto no querés; no me dejas escribir; pero te enojas si yo no te dejo comprar, ni ir a los mall, o comer chatarra, o que tu mamá se meta en nuestras vidas; vos querés controlarme e impedirme todo lo que es sano y cultural, pero lo que es consumista y destructivo para nuestra economía yo no te lo puedo criticar porque es regañarte...

Querido Exilio; no estoy peleando, vos sabes que te amo, pero dame libertad también para desarrollarme como escritor y creador de arte, aunque vos no compartas mi visión personal del arte, porque cada loco ve el arte desde su manicomio... por lo tanto tampoco puedo yo impedirte que vos te expreses como te gusta ni nunca lo he hecho y vos sabes que es verdad...

Querido Exilio; te amo tanto y necesito verte, tocarte, amarte y verte libre a la para mía, pero también quiero que ambos seamos felices y completos como personas; aun no me has dicho si te regresas en septiembre o te vas a quedar como una persona clandestina en aquel país de cárceles y tumbas (estrellas y barras)

Por siempre tuyo
Raíces
El Salvador, San Salvador, 26/8/8

miércoles, 27 de agosto de 2008

Cartas al Exilio XXIX

Querido Exilio:

Como decía el sabio trovador Manu Chau: te llaman clandestina porque nos sos de ese lugar, por lo tanto lo que vos fuiste hacer a ese lugar tambien es clandestino; dar la vida en unmundo tan racista y podrido como este deberia de ser un verdadero crimen que sólo lo cometen inconcientes; que locos fuimos al dar la vida a una pequeña luna...

Querido Exilio; yo te comprendo la desesperación que estás pasando y supongo que no ha de ser nada agradable estar ahí encerrada tanto tiempo, y tener aparte la posibilidad de ser deportada, supongo que en un momento como el que estás viviendo de tu embarazo esa presión extra no es nada agradable; pero tenes que ser fuerte, y pensar las cosas muy bien antes de lanazarte a tomar la decición equivocada, mira que por eso terminaste a donde estás.

Querido Exilio; yo se que te vas a enojar si te escribo poco y no es porque no tenga nada que contarte o que no tenga tiempo para vos; lo que pasa es que el 27 tengo que haber entregado el poemario de cojute y mira que día es hoy y me falta la ortografia y la metrica para revisar

Por siempre tuyo
Raíces
El Salvador, San Salvador, Ciudad Universitaria, 22/8/8

viernes, 22 de agosto de 2008

Cartas al Exilio XXVIII

Querido Exilio:

Te pido mi Exilio amado que seas un poco más paciente, y además un poquisimo más prudente, a veces siento que tu forma de interpretar lo que te cuento es un podo herrado y no se entonces cmo decirte las cosas; querido Exilio, no es regaño lo que te doy en mis mensajes cuando te pido comprensión y madures; simplemente son consejos de una persona que ya cometió los errores que vos estás tratando de cometer y te enojas si te los advierto y luego te enojas cuando los haz cometido y decis que ya no vale la pena pensar en el hubiera; lo que yo te digo mi Exilio es que está bien que te equivoques porque eso forma caracter, el hombre (mujer) nunca es más grande que en la derrota: de ahí aprende a levantarse...

Querido Exilio; a veces no entiendo tus reclamos, te enojas sino te cuento las cosas y si te las cuento las tomas como reclamos o como propaganda; vos más que nadie sabe que sino te escribo lo que te escribo sólo te estaría mandando misivas indigestas como las de algún personaje de García Marquez.

Querido Exilio; lastimosamente no pudimos hablar ayer ya que estaba borracho en un poemario, tan metido en él que no me dí cuenta que estabas al otro lado de la linea y no me dí cuenta hasta que ya iba de salida te pido perdón por eso pero sólo tengo hasta el 27 para entregar los poemas en Cojutepeque y el poemario está muy bueno y no lo quiero desperdiciar vos sabes que son las oportunidades que necesitamos para Metzi.

Querido Exilio; yo nunca he dicho que no quiero trabajar, lo que te repito es que no quiero estar en un trabajo de maquila y desperdiciar mi vida y mi arte, estoy dispuesto a morir en la U y en la poesía pero no en una maquila por un sueldo minimo; porque eso sería entregarle mi arte al sistema por centavos y así si desperdiciariamos tdoa oportunidad para Metzi

Por siempre tuyo
Raíces
El Salvador, San Salvador, Ciudad Universitaria 21/8/8

miércoles, 20 de agosto de 2008

Cartas al Exilio XXVII

Querido Exilio:

Me ha dado mucha gracia tu alto grado de alarmismo, yo te conté eso porque me dio risa el incidente por tan poca cosa, y te lo conté más por el sentido simbólico de la situación: el hombre que se cree grande e invisible y cae derrivado por una piedra en su camino, una piedra más pequeña que su dedo gordo del pie; lo del embarazo y tu piedra es también una alegoría: que te sentías tan preparada y confiada y con algo tan normal como dar la vida a otro ser te descalabras, te caes a pedazos y dejas que tu mundo se desmorone por algo que no era tan grande...

Querido Exilio; yo se que la responsabilidad de ser padres te cambia la vida: pero es una experiencia de la que salís con vida y no algo tan mortal que te puede destruir: es más dar a la luz es tan natural como respirar, recorda que es parte del ciclo de la vida, y Dios y la Pacha Mama son tan sabios que han preparado las condiciones para que salgamos adelante, pero vos te caíste con eso... con nuestro embarazo, te decía que era tu piedra porque yo me mantuve firme y lo vi como lo que era una oportunidad y una bendición que lejos de separarnos como fue el caso debía de unirnos; pero tu desesperación por esa piedrita te derrivo y nos llevaste a ambos a una caída verdaderamente enorme, como lo es el exilio.

Querido Exilio; cuando yo escriba cosas así trata de aprender a leer entre lineas, desaprende esa forma textual de leer que te enseño el sistema y busca el verdadero mensaje que se escribe entre las palabras; te acuerdas del poema que te decía en el que él quería decir te amo y ella lo sabía cuando lo que de su boca salía era cociname frijoles...


Querido Exilio; vos sabes que mi destino está en las letras y en ningún otro lado, sacame de ahí y me vas a matar, no me pidas que me maquilise, tene fe en Dios y en las musas y creeme que aunque me veas muriéndome de hambre estaré feliz, por la Metzi no te preocupes ya que los astros nunca abandonan; ya sabes que Dios aprieta pero no ahorca; la confianza no se demuestra diciendome que crees en mí; sino creyendo cayadamente...

Por siempre tuyo
Raíces
El Salvador, San Salvador, Ciudad Universitaria, 20/8/8

Cartas desde el Exilio XI

Amor! como negarte que me preocupó lo de tu caída, si sabes que yo soy la reina de las preocupaciones y de las exageraciones...pero te agradezco que me lo hayas dicho, aunque no me diste tantos detalles, he leído mil veces ese correo para tratar de adivinar cómo pasó todo: si era en una calle cerca de la universidad, si fue hoy en la mañana, si andabas solo, si al tropezarte con la piedra te heriste y al ver la sangre te desmayaste o si te tropezaste con la piedra y te caiste y ahi te desmayaste...he tratado de armar este rompecabezas todo el día y de decirme a mi misma: a él no le gusta la sangre, quizas eso fue todo...o fue un bajon de azucar porque no esta comiendo bien; pero sobre todo estoy pidiendole a Dios que te cuide, que esto no sea nada grave...es lo único que puedo hacer estando tan lejos.

Y sí, soy una exagerada y me puse a llorar y le conté a mi hermana y ella a su vez le contó a mi mamá...y bueno, ella se preocupó y dijo que iba a llamarte. Ya se que te vas a enojar por esto, pero qué mas podía hacer en la distancia!

Mi amor por favor no dejes de decirme estas cosas, no me ocultes nada, se sincero conmigo, aunque duela decime siempre la verdad. Y como decis esto puede ser una señal o puede significar algo, para mí significa muchas cosas, pero no digas que mi piedra es el embarazo, si es una piedra entonces que sea NUESTRA piedra y no solo mía. Yo te amo y te necesito bien, ncesito que los dos estemos bien para criar a la Lunita juntos. Y yo se que queres dedicarte a la poesía y algún día vivir de eso, yo nunca te he dicho que no, siempre te he apoyado en ese sentido, pero ya sabes que en El Salvador es bien dificil vivir del arte y mantener una familia de ella es peor...por eso te pido que trates de llevar las dos cosas al mismo tiempo: tu amor por la poesía y la vida real (ya sabes a lo que me refiero). Tal vez esa sea tambien tu piedra, tal vez sea yo o tal vez el destino te esta tratando de decir algo o decirnos, mas bien.

Por favor cuidate, CUIDATE, pedile mucho a Dios por nosotros, por la Lunita y tratemos de mantenernos en comunicación, hoy mas que nunca necesito saber de ti. Te amo, te amamos y quiero estar contigo y formar una familia junto a tí.

Con amor:
Peya.

lunes, 18 de agosto de 2008

Cartas desde el Exilio X

Hola Amor!!! sigo aqui desde el Exilio torturandome por las ganas de regresar antes de lo planeado, y digo torturandome porque no se si deba esperar a miles de kms de mis Raíces o regresar a ellas aunque nos muramos de hambre...no se qué hacer, no se si volvería a cometer el mismo error o uno nuevo. Sin embargo, cada día el pensar en regresar a tí es un motivo para levantarme. Mi vida aqui sin ti no tiene sentido, pienso en ti todo el tiempo, cada cosa que hago, que miro, escucho o siento me recuerda a ti: como las abejas, me recuerdan la vez que por poco nos caímos de la moto porque te picó una en el brazo y yo andaba unas pinzas en la cartera y con eso pude sacarte el aguijon...si no te ibas a morir mas del susto que de la picada...te acordas? y asi pequeños detalles que me recuerdan a tí, y en las noches es peor..ya te dicho que lo peor de los sueños es despertar y saber que todo fue solo eso, un sueño.Mi Amor, como te dije un día, al irme de tu lado dejé la mitad de mi corazón contigo y la otra mitad para la bebita, por eso se que cuando lleguemos mi corazón va a estar completo, porque ya estaremos juntos, eso es lo que mas deseo y lo que mas le pido a Dios.Por el momento, la Lunita sigue haciendo de las suyas: moviendose hasta donde le de la panza, antes la sentía solo abajo de mi ombligo y ahora la siento en toda mi panza: arriba, en medio, en los costados, en la parte inferior del vientre, se mueve tanto que me levanta la piel como si quisiera salirse y es tan divertido sentirla!!! yo trato de animarla hablandole y hoy estoy mas segura que me escucha...imaginate que a veces se le ocurre hacer sus acrobacias a media noche (quizas cuando estoy soñando contigo) y tengo que despertarme para decile que se tranquilize y que trate dormir...es tan bella, me la imagino tan linda, una combinación extraordinaria de ti y de mi.Por ahora solo podemos esperar, no tenemos de otra, por favor no perdas la fe en este amor. Te amo mucho, te amamos mucho, confia en nosotras.
Con amor:Papalotl y Metzi.

Cartas al Exilio XXVI

Querido Exilio: Tan grande es el poder de Dios, y tú más que nadie sabe que yo se leer todos sus mensajes y sus señales: ahora me toco entender una de sus lecciones una muy dura por cierto... tan grande es su poder que una piedra puede derrivar al hombre más orgulloso, o al soberbio: peya una piedra mas pequeña que un dedo me hizo morder el polvo y ver hasta luces, peya yo que me he caído de la moto,, que me he golpeado, y he sufrido miles de percances fuertes nunca caí ni mordí polvo tan simplemente como hoy: una piedrita en mi talón me causo una herida más pequeña que cortarse un dedo cortando carne o cebolla; esa cortadita me dirrivo peya: tal como una honda derrivo al gigante Goleat; peya perdí el conocimiento y se me durmieron las manos y los pies, me desmaye por una cortada tan insignificante; la policía tuvo que venir a tirarme a la U para que me curaran aquí porque me desmaye; peya una cortada por una piedra miserable me tumbo...
Querido Exilio; extraño tus mensajes; porque ya no me escribes ni me mandas correos; te la estás desquitando porque no te hablo y esa es tu dura venganza para desesperarme; tus últimos mensajes decían que queres volver al país retornar de tu exilio; lo cual es bueno pero también tengo yo las mismas dudas que vos ¿qué va pasar? y que hará tu mamá para mantenernos separados; también pienso que vos no tenes el valor de enfrentarla... Querido Exilio; yo tengo que mantenerme firme, aunque las últimas experiencias (la piedra y el talón) me hacen pensar que también debo olvidar mi soberbia... talvés tu piedra sea tu embarazo y tengas que aprender tu lección... la mía parece más insignificante pero me ha hecho valorar mi vida...
Querido Exilio; si regresas yo aquí estaré, pero también quiero hacer poesía, aunque me doy cuenta que la vida es tan frágil que una piedra en el camino te puede parar el avance y si Dios a si lo desea el hombre por más que se crea grande no puede nada sin él; bueno también quiero confesar que por hambre le robe unas galletas a mi abuela porque hoy mi mamá le tenía que compra nuevas y ella ya no contaba con ellas; en la tarde me da hambre y no tengo como paliarla...
Querido Exilio; yo siempre pienso que Dios no castiga; pero enseña y enseña con piedras y parábolas, con cosas que vos ves insignificantes pero a la larga esas son las que te pueden cambiar la vida.
Por siempre tuyo
Raíces
El Salvador, San Salvador, 18/8/8